Si eres de los que sienten que el corazón late más fuerte al oír “mar abierto”, prepárate, porque lo que estás a punto de leer puede convertirse en tu próxima aventura favorita. Estamos hablando de uno de los momentos más alucinantes que puedes vivir en el Pacífico colombiano: el avistamiento del tiburón ballena.
El tiburón ballena: un gigante amable
El tiburón ballena es el pez más grande del planeta. Sí, el más grande. Puede llegar a medir más de 12 metros de largo, y aunque su tamaño impone, su carácter es totalmente pacífico. Este coloso marino se alimenta por filtración, tragando grandes cantidades de agua para cazar fitoplancton, kril, macroalgas, crustáceos y, por supuesto, sus favoritas: las sardinas.
¿Desde dónde migra este gigante?
Durante su migración, este increíble animal recorre miles de kilómetros. Llega al Pacífico colombiano desde aguas del Pacífico Central, cercanas a Panamá, Ecuador y más al sur, en busca de alimento. Su brújula natural lo guía tras la gran mancha de sardina a gallona, que se convierte en su banquete anual.
¿Cuándo ver tiburón ballena en Colombia?
Cada año, entre finales de abril y todo mayo, el tiburón ballena se deja ver en las costas del Pacífico colombiano, especialmente en zonas como Nuquí y Bahía Solano. ¿La razón? Viene siguiendo a la sardina a gallona, que también hace su aparición en estas fechas.
Así que, si estabas buscando el mejor momento para ver tiburón ballena en Colombia, ya lo sabes: temporada de abril a mayo es tu ventana dorada.
Safari marino: apnea (no tan profunda) con el gigante del mar
Uno de los mitos más comunes es que necesitas ser un buzo experimentado para ver al tiburón ballena… y no es así. Este animal suele nadar entre 3 y 5 metros de la superficie, por lo que no tienes que hacer una apnea profunda para observarlo de cerca. Basta con tener buenas aletas, máscara, y estar listo para moverte rápido en el agua.
¿La razón? El tiburón no se queda quieto. Está enfocado en su misión: seguir el cardumen de sardinas. Así que prepárate para nadar y sentir cómo la adrenalina sube con cada aletazo.
Y hablando de sardinas...
Ver la sardina es otro espectáculo en sí mismo
Antes de que veas al tiburón, vas a notar algo en el agua: una masa oscura, densa y viva que se mueve como un solo cuerpo. Es el cardumen de sardinas. Desde la superficie parece un edificio de peces que cambia de forma en segundos, como si respirara.
A su alrededor, aves marinas giran en picada, listas para entrar en acción. Delfines, atunes y hasta mantarrayas aprovechan el caos. Estás viendo un ecosistema en movimiento. Un espectáculo natural impresionante que, por sí solo, ya vale el viaje.
Y justo en medio de todo eso… aparece el “pecoso”.
¿Cómo hacerlo responsablemente?
Esta actividad está creciendo cada año, y eso es increíble. Pero también trae una gran responsabilidad. Asegúrate de hacerlo con agencias de turismo responsable que conozcan y respeten las normas para el avistamiento del tiburón ballena.
Aunque este animal no es agresivo, el ruido excesivo de lanchas o una mala práctica turística puede afectar su comportamiento y hábitat. Por eso, apoya experiencias que prioricen el bienestar de la fauna marina.
Nuestra experiencia fue un 100/10
El año pasado lo hicimos y te juramos que fue una experiencia transformadora. Es imposible no sentirse diminuto (y afortunado) al nadar al lado de un ser tan majestuoso. Si tienes la oportunidad, no lo dudes: hazlo.
Check list: ¿qué llevar para el avistamiento del tiburón ballena?
Aquí va nuestra lista salvavidas para que no te falte nada:
- 🧥 Poncho impermeable: llueve bastante y vas a estar mojado casi todo el tiempo.
- 🎒 Drybag: ideal para mantener tu celular, cámara o ropa seca mientras andas en lancha.
- 🩱 Rashguard y leggins: protección contra el sol, agua fría y especies marinas (sí, hay medusas por ahí).
- Jersey con Capucha: Protección UV 50+, capucha y secado rápido.